En qué debemos fijarnos especialmente a la hora de comprar una muñeca de porcelana antigua Print
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Artículo basado en 10 Things You Should Inspect When Buying an Antique Bisque Doll
Traducción de Lapoupee


Lo primero es asegurarnos de que es antigua. Una muñeca de porcelana sólo puede ser antigua si es como mucho de 1925-30. No existen muñecas de porcelana antiguas posteriores. Los materiales fueron cambiando y puede que algunos de los fabricantes (muy pocos) mantuvieran su industria dedicados a la composición, o a los nuevos plásticos, pero los moldes en biscuit terminaron en torno a esa fecha. Desde luego ninguna fábrica de muñecas de porcelana en Europa funcionó tras el inicio de la II Guerra Mundial. Lamentablemente en este mundo se utiliza el térnimo "antiguo" de manera sin sentido muchas veces, por desconocimiento o por lenguaje coloquial y puede dar lugar a errores.

Detalles específicos en los que nos debemos fijar especialmente:

1. ¿Viene la muñeca marcada con las marcas o signos del fabricante?

Esto ya de por sí es un mundo, debemos saber qué tipo de muñeca estamos comprando, y de qué modelo en la medida de lo posible. Existen infinitud de publicaciones, en papel y también páginas de referencia on line para poder saber más de la muñeca que nos interesa. No obstante ya sabemos que algunas de las mejores muñecas no se marcaban, o se marcaron muy tarde en la historia de su fabricación, y algunas de las más bellas y antiguas carecen de marcas.

2. ¿Tiene la porcelana grietas, pelos, restauraciones u otros daños?

Esto es la cosa más obvia de inspeccionar, pero para asegurarnos deberíamos usar  una luz dentro de la cabeza de la muñeca. La cabeza debería ser translúcida,  cualquier parche oscuro que no sea el del yeso que se pone los ojos puede indicar trabajo de restauración.
También resaltarán la mejor las grietas finas o pelos con la utilización de una.
Si no es posible hacer esto, por el modo en el que está pegada la peluca u otro motivo, puede acercar la luz todo lo posible a la porcelana e inspeccionarla así. No es mala idea revisar el biscuit con ayuda de una lupa para ver los detalles que se nos pueden escapar.

Una muñeca con deterioro en la porcelana, sobre todo en la cara, pierde casi todo su valor. No obstante, siempre valdrá más objetivamente una Gaultier con un pelo o una falta, que una muñeca de marca inferior en impecables condiciones, hay que valorarlo todo antes de tomar nuestra decisión.

3. ¿Han sido reemplazados los ojos, son los apropiados para la muñeca?

Siempre es preferible que la muñeca lleve sus ojos, antiguos, de origen, los apropiados a su modelo, y que conserven sus características de durmientes o no, de cristal, con relieve, etc. Pero no es necesariamente un problema si se han reemplazado por ojos adecuados, antiguos y acordes con la muñeca. Sí es malo, sin embargo, que unos ojos que debieran ser durmientes o flirting no funcionen o se hayan cambiado por otros fijos.


4. ¿El biscuit es excesivamente liso o sin relieves?

Esto puede indicar que la muñeca es una reproducción. Algunas muñecas antiguas tenían el biscuit muy liso al tacto, pero nunca tan perfecto y super liso como las actuales, de tacto como cristal. Siempre nos queda mirar dentro de la cabeza para ver si tienen pátina de antigüedad y observar sus condiciones generales interiores.
Aunque las reproducciones deben ir marcadas por el artista o artesano, por desgracia hay muchos que copian los moldes con intención fraudulenta, y omiten este paso intentando pasar las muñecas por antiguas. Un biscuit en exceso liso, “perfecto”, sin vida, suele ser indicativo para nuestro instinto de coleccionistas de que algo no va bien.

5. ¿Si el vestido es antiguo o el original, cuál es su estado e integridad?

Es casi imposible hacer la distinción de vestido original o antiguo, pues la muñeca pudo comprarse desnuda, o cambiársele la ropa por su dueña por ejemplo en 1870. No obstante, es normal que se prefiera siempre el vestuario llamado original, incluyendo zapatos y complementos.
Debe estar en el mejor estado posible, interior y exterior, aunque es ridículo pretender que telas naturales y orgánicas como la seda o el algodón lleguen impolutos y sin roturas a nuestros días, cien años después. En el caso de muñecas nunca sacadas de la caja pudiera ser (depende de dónde hayan estado guardada y de la voracidad de polillas y ratones). Generalmente basta con que las ropas estén en un estado aceptable: desconfiemos siempre de la perfección y la absoluta limpieza, es que no puede ser si son auténticamente antiguas.
Los vestidos antiguos deben manipularse con extremo cuidado en la inspección  porque hay telas como la seda, el tul o el crêpe que se nos pueden quedar en las manos a pedazos si son auténticamente de la época. Incluso dificulta desnudar o descalzar a la muñeca para venta o inspección de compra.



6. Y si el vestido ha sido reemplazado ¿es el apropiado para la muñeca?

Básicamente debe de estar vestida acorde a su tipo, modelo y edad. No se puede aceptar una muñeca de China de 1860 con un traje de bebé recién nacido, o una niña de 1920 con un modelo del s. XVIII. Un poco de sentido común y de gusto general enseguida nos dirá si la cosa es como debe ser. Vestidos de fantasía (o más bien de pesadilla) con horrendas telas sintéticas brillantes o estampadas, enormes gorros medievales sin sentido para este tipo de muñecas,  botones o adornos plásticos o cortes extravagantes enseguida nos llaman la atención negativamente.

Del mismo modo, si buscamos vestimenta para nuestra muñeca, por reemplazo del vestido o por haberla adquirido desnuda, debe tenerse en cuenta todo esto. Tejidos naturales, mejor telas y adornos antiguos, adecuados al tipo de muñeca. Una fashion debe ir vestida de señorita elegante de la época, una niña puede llevar otro tipo de vestuario, y así dependiendo de cada muñeca. Existen muchas imágenes e incluso patronajes de origen donde poder encontrar la ropa más adecuada a cada muñeca antigua.

7. ¿Tiene la muñeca un cuerpo adecuado?

Lo básico que debemos mirar es si el cuerpo corresponde, en tamaño y “edad” a la cabeza de porcelana. Hay verdaderos remixes horrendos entre cabezas enormes y cuerpos diminutos, o cabezas de porcelana en cuerpo de andadoras de cartón de los 50... incluso, en el peor de los casos, muñecas obviamente reproducción que se han incrustado en un cuerpo antiguo, seal el que sea, para hacerlas pasar por antigüedad completa. ¡Es muy triste!

Una muñeca bebé debe llevar un cuerpo de bebé, hay muchos modelos en los que sí es posible saber el tipo de cuerpo que llevaban. Por ejemplo, los bebés con cuerpo de composición de Handwerk o los pequeñines con cuerpo de trapo de A. Marseille, o el muy imitado bebé Kaiser con su cuerpo de bebé y manita torcida.
Las muñecas niñas/os pueden llevar cuerpo de madera y composición, de cabritilla, etc, pero siempre nos aseguraremos en lo posible de que es el original, o el adecuado dentro de cada tipo de muñeca y cada fabricante. En principio una muñeca francesa debería tener un cuerpo francés, y una alemana uno de su nacionalidad, salvo que sepamos que un fabricante específico proporcionó cuerpos a tal o cual fabricante de otro país.

8. ¿En qué condiciones está el cuerpo?

No es cierto que el cuerpo "no valga nada" o que sólo tenga valor objetivo la cabeza de porcelana. Un cuerpo restaurado o muy estropeado baja también el precio de la muñeca, aunque siempre será mejor que un cuerpo moderno de sustitución, o con partes cambiadas. ¡Debemos mirar que no se trate de un cuerpo tipo monstruo de Frankenstein, con piernas de un tipo, brazos de otro u horrores semejantes!
Siempre es preferible el original antiguo, por supuesto. Dependiendo del fabricante o el modelo el cuerpo también tiene mucho valor por sí mismo, como los cuerpos marcados de Steiner, o los de los bebés y muñecas más grandes, o los de cabritilla marcados originales de un tipo específico de muñeca.

9. ¿Qué calidad tiene la pintura de los detalles de la muñeca?

No todos los fabricantes tenían la misma calidad, y no todos los artistas eran igual de buenos. La antigüedad de la muñeca no lo es todo, tampoco la delicadeza de su porcelana. Debemos fijarnos en si la muñeca está bien pintada por el artista original, con las pestañas iguales, el color de mejillas igualado y bien coloreado, si la boca es perfecta o por el contrario está torcida o mal terminada... Una mignonette all bisque muy pequeña o muñeca de casita de muñecas puede estar pintada con un poco más de descuido, en general, pero en algunas de las mejores marcas y modelos de muñeca bebé o niña es imposible que de la fábrica se les permitiera salir con estos defectos. Una boca torcida o unas pestañas que nos parezcan extrañas o mal hechas en una muñeca de gran marca o categoría tiene muchos puntos para que sea una imitación que nos intentan colar.

10. ¿Es la peluca la apropiada?

La peluca debe de ser de mohair o de pelo humano/ natural, y es siempre deseable que la muñeca conserve la original. Lamentablemente muchas veces este delicado cabello está estropeado, ha sido atacado por polillas o se ha perdido en parte o al completo.
Deberemos pensar entonces en sustituirla por una peluca antigua y adecuada, o de no poder conseguir una, por una de las excelentes pelucas fabricadas hoy en día en estos materiales. Nunca de plástico, poliéstee o esos horrendos tirabuzones brillantes de muñeca moderna, que desmerecen la pieza de porcelana.

11. ¿Cuál es la impresión en conjunto que nos da la muñeca?

Este punto es más instintivo y fruto de la experiencia, pero no por ello menos importante. Una muñeca “extraña” enseguida hace torcer la nariz al coleccionista experto o al amante de las muñecas antiguas que ya ha tenido muchas en las manos. No está bien terminada, la cabeza se ve desproporcionada, el cuerpo no es el adecuado, sus manos no nos cuadran, o la cara nos parece de niño pequeño aunque esté vestida de mujer... o por el contrario es una pieza que nos hace suspirar nada más verla y que aunque tenga algún pequeño defecto o desgaste por la edad nos mueve el corazón.

12. ¿Es el precio ajustado y realista al tipo y marca de la muñeca?

El precio de mercado es más o menos parejo en todos sitios, sobre todo hoy en día que todos tenemos libros e internet y hay muchas páginas donde consultar. Todos los que compramos y vendemos muñecas antiguas sabemos más o menos en torno a qué precio oscila cada tipo y qué puede ser correcto a cada muñeca. Una A.M. de modelo común puede comprarse en torno a 250-400 euros dependiendo de su estado y tamaño, pero una Jumeau en perfectas condiciones, incluso desnuda, puede costar más de 2000 sin que nadie se lleve las manos a la cabeza por ello.
Desconfiemos de esas gangas inauditas que no nos podemos creer... normalmente es que no son creíbles. Una muñeca de valor adecuado de unos 800 euros no puede venderse por 50 de ningún modo. Es al cien por cien una pieza problemática, y casi seguro una reproducción mejor o peor apañada para intentar darnos el pego. ¡Mucho cuidado con eso! Aunque haya crisis nadie nos va a regalar los euros a dos céntimos.
Lo mismo cuando una muñeca de precio medio conocido sube por las nubes sin motivo ninguno, puede tratarse de un vendedor que desconoce este mundo y lo que vende y por lo tanto de poca confianza para la transacción.